中南米情報

日本にはあまり伝えられないラテン・アメリカ諸国の国内情勢を探ります。

悲劇に終わったニカラグアの麻薬捜査

 

 ニカラグアの国家警察隊は11日夜、麻薬撲滅運動の一環として実行した作戦で、11歳の子供たちを含む家族の3人を射殺した。
 この家族は教会のおつとめをした後に自動車で帰宅する途中だった。警官隊がドライバーに停車するように命令したが、強盗たちに攻撃されたものと考えて、停車しなかった。警官たちは発砲した。
 この攻撃で、エフレイン・ペレス・ラミレスさん(11歳)、アウラ・マイアナ・レイジェス・ラミレスさん(11歳)、カテリーネ・ラミレス・デルガディロさん(22歳)が死亡した。アクセル・レイジェスさん(12歳)とミリアム・ナターシャ・グスマン・ラミレスさん(5歳)は重傷で、マナグアの病院に収容された。

 国家警察のアミンタ・グラネラ長官は、数時間後に事件現場を訪れ、公的な調査を行うことを家族に約束した。ニカラグアのダニエル・オルテガ大統領はこの事件に関与した警官隊を罵倒した。警官隊のメンバーはマナグアに送られ、取り調べの後に裁判にかけられる予定である。警官隊は、麻薬を運んでいると想定された自動車と、家族の自動車を間違えのたのである。
 ニカラグアのマスメディアはこの事件を「虐殺」と呼んでおり、人権団体は射殺した警官たちを厳しく非難し、取り調べを実行して、射殺に携わった警官たちを処罰するように求めている。ニカラグア国民も激しく憤慨しており、ソーシャル・ネットワークでは大統領の辞任を求める声であふれている。かつてサンディニスタ革命運動の有名な活動家だったドーラ・マリア・テレス氏はツイッターで「グラネラ氏にわずかでも感受性というものがあるならば、警察長官という不法な地位を辞任すべきであろう」と語っている。

internacional.elpais.com

 

El operativo antidrogas que terminó en tragedia en Nicaragua

La Policía Nacional mata por error a tres miembros de una familia, incluyendo dos niños, que regresaban de un oficio religioso

 

La Policía nicaragüense en una protesta en Managua. / Mario López (EFE)

 

Tres miembros de una familia, incluyendo dos niños de 11 años, fueron asesinados a balazos la noche del sábado en un fallido operativo antidrogas organizado por la Policía Nacional de Nicaragua.

La familia regresaba a casa después de un oficio religioso cuando un grupo de oficiales ordenaron al conductor del vehículo, Milton Reyes, que se detuviera. Éste, según el relato de la familia, pensó que se trataba de un asalto, por lo que no se detuvo. Los oficiales dispararon contra el vehículo.

En el asalto murieron Efraín Pérez Ramírez, de once años, Aura Marina Reyes Ramírez, de 11 años, y Katherine Ramírez Delgadillo, de 22. Mientras que Axel Reyes, de 12 años, y Miriam Natasha Guzmán Ramírez, de 5 años están en estado grave en un hospital de Managua.

La jefa de la Policía Nacional, Aminta Granera, asistió horas después al lugar de los hechos y anunció a los familiares que se ha iniciado una investigación oficial, mientras que el presidente Daniel Ortega ordenó que se diera baja deshonrosa a los oficiales implicados en el caso. "Estoy conmocionada, estoy en shock", dijo Granera.

¡Nos agarraron a balazos y nos mataron a todos mis hijos y a mi hermana, nos poncharon la primera llanta y mi marido creía que eran ladrones, entonces aceleró!

Leyka Ramírez Delgadillo, esposa del conductor del vehículo

Los policías serán trasladados a las celdas de la Dirección de Auxilio Judicial (DAJ), en Managua, donde esperarán el fin de las investigaciones y serán precesados.

El relato de los familiares es conmovedor. Dijeron que al regresar del oficio religioso en la comunidad de Esquipulas, zona rural de Managua, fueron detenidos por el grupo de agentes. "Mi marido creía que eran ladrones, entonces aceleró", contó Leyka Ramírez Delgadillo, esposa del conductor del vehículo. La familia siguió su trayecto a pesar de que las llantas del coche estaban reventadas. Unos metros después fueron interceptados por un segundo grupo de oficiales que también abrió fuego. Una fuente de la Policía dijo a la agencia EFE que el vehículo fue confundido con un automóvil cargado de droga que los agentes esperan en esa región a las fueras de la capital.

"¡Nos agarraron a balazos y nos mataron a todos mis hijos y a mi hermana, nos poncharon la primera llanta y mi marido creía que eran ladrones, entonces aceleró, y no se pararon, nos agarraron a balazos! ¡Cómo dejaron el carro, lleno de balas!", dijo Ramírez a la televisión local. La mujer contó que vecinos de la zona acudieron a ayudarlos, pero los oficiales lo evitaron e incluso decomisaron los teléfonos móviles de quienes grabaron el automóvil baleado y los cadáveres de la familia.

Los medios de comunicación de Nicaragua han calificado el hecho como una "masacre", mientras que organizaciones de derechos humanos han criticado con dureza el actuar de la Policía y piden una investigación seria y que se tomen medidas contra los oficiales implicados. El ataque ha dignado a los nicaragüenses, que en las redes sociales piden la dimisión de Granera. "Si la señora Granera tuviera un poquito de sensibilidad, renunciaría a su ilegal cargo de jefa policial", escribió al exguerrillera sandinista Dora María Téllez en su cuenta de Twitter.